“La Dra Bárbara Sturm: afirma que no incluiría el Retinol en su rutina de belleza”
Con esta afirmación se han disparado las alarmas y las preguntas de los pacientes sobre el retinol.
¿Crees realmente que esto es verdad?
Antes de responder a esta pregunta vamos a razonar esta afirmación y comprobar que es un craso error.
Lo primero que tenemos que saber es ¿Quién es la Dra Bárbara Sturm, para que esta afirmación tenga tanto impacto?
La Dra Bárbara Sturm es un médico ortopeda, no DERMATÓLOGA, que ha creado una línea de cosméticos, que es famosa por ser utilizada por modelos y celebrities.
¿Qué razones ha dado para demostrar dicha afirmación?
Primero vamos a conocer sus palabras exactas, que fueron:
“Nunca lo utilizaría porque causa inflamación. Además, el retinol destruye las funciones de la barrera de la piel y la microbiota.
El retinol destruye y luego repara.”
¡Vamos a desbancar esta afirmación con EVIDENCIAS CIENTÍFICAS!
Dicha afirmación no es concordante con los múltiples estudios que avalan la eficacia del retinol.
En primer lugar, el retinol, es un derivado de la vitamina A y no produce inflamación.
De hecho los efectos del retinol, por los que produce los cambios en nuestra piel se deben a que :
1-Tiene un efecto antiinflamatorio: elimina la inflamación.De hecho si produjera inflamación , los dermatólogos, no los utilizaríamos, para tratar enfermedades que son producidas por una cascada inflamatoria como:
el acné, la psoriasis, la enfermedad de Darier,las queratodermias… e incluso los linfomas cutáneos.
2-Regula la proliferación y diferenciación celular. Por lo tanto,no destruye las barreras de la piel ni la microbiota sino que :
2.1--Previenen y tratan el envejecimiento cutáneo: puesto que estimulan la producción de colágeno y elastina mejorando, la luminosidad, textura y firmeza de la piel.
2.2--Inhibe la proliferación de células tumorales.
3-Además, disminuyen la producción de melanina y por tanto aclara las manchas cutáneas, producidas por el sol.
3-Y reducen la producción de grasa, por eso la utilizamos mucho en enfermedades que tienen una disregulación alterada de la función sebácea: acné, dermatitis seborreica…
Después de todos estos argumentos:
¿Todavía crees que el retinol no es una molécula imprescindible en tu rutina de belleza?